Micropigmentación de ojos: la forma más fácil de realzar tu mirada

¿Te imaginas levantarte, mirarte al espejo y ver tus ojos ya definidos?

Como si llevaras eyeliner pero sin haber tocado un pincel. Así de mágica (y práctica) es la micropigmentación de ojos, uno de los tratamientos más buscados por quienes queremos vernos bien sin perder tiempo delante del espejo.

En Paula Brows sabemos que el maquillaje permanente no es solo estética, también es comodidad, seguridad y autoestima. Por eso, si estás pensando en hacerte un eyeliner permanente, aquí te contamos si es para ti y por qué cada vez más mujeres lo eligen.

¿Es para ti la micropigmentación de ojos?

Este tratamiento puede ser justo lo que necesitas si te sientes identificada con alguna de estas situaciones:

• Te cuesta hacerte el eyeliner cada mañana (¡o te sale uno bien y el otro no!).
• Tienes poco tiempo pero no quieres renunciar a una mirada bonita.
• Llevas gafas o tienes la vista cansada y maquillarte los ojos es un rollo.
• Tienes alergia al maquillaje o te da pereza ponértelo.
• Haces deporte, vas al gym o a la piscina y odias que el delineado se corra.
• Simplemente te gusta verte bien… sin esfuerzo.

En resumen: si buscas una solución práctica, natural y duradera para definir tu mirada, este tratamiento te va a encantar.

¿Qué beneficios tiene el eyeliner permanente?

Muchísimos. Aquí van algunos de los que más valoran nuestras clientas:

• Te olvidas del eyeliner por al menos un año (¡y en algunos casos hasta tres!).
• Ganas tiempo cada mañana.
• El delineado no se corre, no se mueve, no desaparece.
• Resalta tu mirada aunque no lleves nada más de maquillaje.
• Podemos adaptarlo a ti: fino, discreto, más marcado, difuminado… como tú quieras.
• Te verás siempre arreglada, incluso recién levantada o después de entrenar.

Y lo mejor: es un tratamiento seguro, rápido y prácticamente indoloro. En Paula Brows usamos pigmentos de calidad, aparatología avanzada y aplicamos el diseño que más favorece a tu tipo de ojo.

¿Cómo lo hacemos en Paula Brows?

Antes de empezar, hablamos contigo. Queremos saber qué estilo te gusta, qué esperas del resultado y cómo es tu rutina. Luego:

1. Te hacemos un diseño personalizado, adaptado a tu ojo y a tu estilo.
2. Aplicamos el pigmento con una técnica muy precisa (y con mucho mimo).
3. Te damos todas las pautas de cuidado para que cicatrice bien y el resultado dure lo máximo posible.

La sesión dura entre una hora y hora y media. Después puedes hacer vida normal, solo tendrás que seguir algunos cuidados básicos. Y al cabo de unas semanas, hacemos un pequeño retoque para perfeccionar el trazo.

¿Te animas a probarlo?

Si llevas tiempo queriendo hacerte un eyeliner permanente, pero no estabas segura… este es el momento. En Paula Brows te acompañamos en todo el proceso, con un trato súper cercano y resultados que hablan por sí solos.

¡Despídete del eyeliner y siéntete perfecta cada vez que te mires al espejo!